Esto se terminó, peró seguro continuará, no sabemos cuando ni donde, peró seguiremos viajando i contando. Ahora es tiempo de pensar sobre lo vivido, que las sensaciones se aposenten bien, contar lo sentido en casa y seguro que cuando allí estemos seguiremos pensando en esos días, el viaje va a seguir de alguna manera, mientras alguien quiera escuchar.
Pero, no nos podemos despedir de este blog ni de la gente que lo ha seguido sin antes mencionar a todos los amigos i amigas, muchos y muchas, que hemos ido conociendo durante estos inolvidables días, días en los cuales necesitas hablar, expresarte, olvidar o recordar, en estos días siempre hemos tenido a alguien a nuestro lado que nos ha escuchado y ayudado, y como no nosatros a ellos, así es.
I asi es tambien que viajando a uno le pasan cosas por la cabeza que nunca antes le habian pasado, cada segundo tus ojos ven, tu olfato huele y tus oidos oyen algo nuevo, diferente, nunca antes experimentado, de ahi estas sensaciones que necesitas contar a alguien.
I a ese alguien es a quien se dedican estas linias.
Amigos i amigas, hechos en 24h o en un viaje en bus o la cajera del super; amigos y amigas que no son de toda la vida, ni del pueblo, ni del trabajo, ni del mismo circulo social. Son relaciones muuuy intensas, en muy poco tiempo y que llegan muy ondo en ese corazoncito que necesita.Por ese motivo lo unico que termina es el viaje, no los viajeros ni sus amigos.
Viaje largo por algunos y corto para otros, cuatro paises, 180 días de este año sin invierno, seis lunas llenas, muchas emociones en cada aventura, muchas culturas conocidas, muchas montañas subidas, más de 70 camas diferentes, gastronomia, música, hemos estado durmiendo a más de 5400 metros sobre el nivel del mar, hemos visto lava, geisers, miles de animales, el MachuPicchu, el Perito Moreno y la selva peruana, boliviana y brasileña, cruzado el Estrecho de Magallanes oliendo ese aire helado de la Antártida, hemos navegado por 8 días el Rio Amazonas en lancha, convivido con comunidades en islas del Titikaka, hemos probado el temporal y la naturaleza en estado puro en esos días de autoestop por la Patagonia, cruzado el Mato Grosso de Brasil, nos hemos bañado en el Atlántico y en el Pacífico, hemos surfeado en Perú, nos hemos emocionado con los tangos en la gran ciudad de Buenos Aires, vibrado con el norte argentino y su carnaval, admirado las culturas y rituales ancestrales, divisado el mejor cielo nocturno nunca visto en Ischigualasto, lo hemos pasado mal, hemos contemplado y vivido el Fitz Roy, aprendimos a hacer artesanias, hemos llorado por los mineros de Potosí, hemos caminado por el cielo en Uyuni, bañado en la Patagonia y el Titikaka, hemos recorrido por tierra unos 10.000km que traducidos en horas de bus no lo quiero ni saber, hemos pasado de la latitud 3º 51' sur a los 54º 57' i de longitud 57º 32' a los 79º oeste, hemos cambiado la hora muchas veces con diferencias de tres a seis horas respeto españa y sellado 8 páginas de pasaporte, nos ha nevado, llovido y soleado, hemos soportado fiebres a causa de insolaciones en los desiertos norteños, hemos matado pulgas a montones, comido el caiman de Iquitos, fotografiado las cataratas del Iguazú por ambos lados, maravillarnos en el paso fronterizo de la Quiaca-Villazón, nos hemos poseido del jaguar en la selva peruana, hemos reido con delfines del Amazonas y de Tierra del Fuego, visto pinguinos, focas, leones marinos, osos hormigueros, un tapir, cocodrilos, comido decenas de frutas desconocidas en la lancha a Iquitos, conocido la tierra que vio nacer El Che, Gardel, Maradona, Eduardo Galeano y otros grandes personajes, hemos aprendido del nivel cultural de argentinos y uruguayos, pasado de temperaturas de bajo cero a 45º en pocas horas, respirado profundamente en una de las ciudades más altas del mundo, visitado unos 15 patrimonios de la humanidad y una maravilla del mundo, realizado más de 4000 fotos y infinitas sonrisas, hemos cagado líquido durante un mes en Bolivia, hemos cruzado y visitado lugares supuestamente no aptos para extrangeros debido a su peligrosidad, nos hemos paseado por plantaciones de coca, conocido las realidades sociales de cada país sin mostrarnos reacios a ninguna, y muchas y muchas cosas más, incontables e innombrables, pero que ahi estan.
Y ahi van estos amigos, algunos sabemos que nunca más los volveremos a ver, a otros sí, pero a todos vamos a recordar, como a amigos y a muchos como hermanos.
El primer dia de viaje al hostel Pangea i toda su gente, el gaucho, etc. A las decenas de personas conocidas en Uruguay que desinteresadamente nos aconsejaron sobre que ruta seguir, donde ir y a quien visitar.
Los niños del cerro Arequita i del interior del Uruguay en general, que algun dia seran como Messi!!
A las ocho personas que nos "levantaron" haciendo dedo, en aquellos días de soledad en la Patagonia argentina, en especial a los cordobeses Marcelo y Esteban por su hospitalidad y sus cuartetos, y por encima de todos a Daniel, ese joven de La Plata quien nos rescató de una inminente tormenta y soportó nuestras teorias durante unos siete días, que nos enseño parte de lo aprendido durante el viaje, su furgo y su música.
A Ariel, sus amigos y familiares con quien compartimos esa paella "gashega" con carne de vaca, a las puertas del Perito.
Al Hostel Batzoki, donde conocimos a Patrick, a sus trabajadores, que me prestaron unas frazadas (mantas) evitando así una hipotermia en el Parque Nacional.
A Jordi de El Bolsón, un gran enfitrión, gran recuerdo.
A los locos del refugio Frey en San Carlos de Bariloche.
A los chicos de Villa La Angostura, esos porteños, bonaerenses y rosarinos con los que disequemos unas botellas de Fernet i Coca.
A Filip, por esas dos horas de conexión a full!
A toda la gente de Valle Fértil, Roberto del hostel y a toda su gente. Mención especialisima a las niñas, Romi "la negra", Tamy, Eugénia, Georgina y Enilma, con las que compartimos grandes momentos, charlas y risas, mientras degustábamos ese grandioso asado "el mejor", con "tomatina". I esos momentos en Buenos Aires y en el "pueblo", mil besos.
Como no a Fabian "el sabio", de la Plata, como no! Quien nos mostró la cara más cultural de la Argentina, con su música y su literatura.
A las biologas de Talampaya. Y a las dos familias que acojieron a este par de pordioseros en sus autos.
A toda la gente del Norte de Argentina, de las provinvias de Salta y Jujuy. En especial a José, Silvina, Javier, Miguel y a los Rompecorazones.
Los "number one" la pandi, Vane y Eva (las rapis around the world), a Guille (ese que canta!) y a Pablo (el maluco), "petons" i nos vemos en casita.
Miguel de Ecuador (Uyuni)
En Siscu.
La Susanna de Euskal Herria en Sorata, y a Fabian, el sensei artesano.
A Olivier y a su familia.
A Moni, gran riojana, a quien queremos, y a su compa Arturo, incansable izquierdista colombiano! Con quien compartimos esos cinco dias de productiva navejación por el Amazonas.
A Flor y José, de Nuequén, qué unión! y que lástima separarnos tan pronto.
Y en definitiva a toda aquella gente que nos ha ayudado, ya sea para bien o para mal, a todos ellos gracias.
Ha sido realmente un viaje alucinante e inolvidable aunque le sigan muchos otros, si bien hemos visto cosas realmente espectaculares, grandes formaciones y caprichos de la Pachamama, lo que más ha significado para nosotros ha sido este intercambio con estas y muchas otras personas anónimas, es lo que realmente marca la diferencia.
Buffff! Nuestra cabeza esta llena de todo, no faltan ganas de volver a casa y reencontrarnos con los nuestros, familia y amigos, pero la verdad, es que uno sabe que allí todo va a seguir igual y que los que te importan alli estarán como siempre, a nuestro lado y nosotros al suyo. Queremos seguir este viaje, de ganas que no falte, pero tenemos que ir para volver.
Sabemos que el blog esta muy desactualizado y la verdad es que sentimos que haya gente que con regularidad siguiera nuestros pasos y nosotros, en cierto modo, os hemos fallado; los motivos ya los sabeis.
Eso sí, quien quiera que le contemos todo en persona, lo que esta y lo que no esta, que no dude en localizarnos y con mucho gusto lo vamos a contar, que como ya hemos dicho antes, recordar nos va a ayudar a que el regreso nos sea más llevadero.
A cambio de una cervecita, claro!
Mil besos.
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